No, no me refiero al malestar físico de movimientos involuntarios, me refiero a la cuestión planteada por Cyrill N. Parkinson en 1955, publicado por primera vez en un seminario para la famosa revista de The Economist. En éste, se explica porqué cuando una persona que debe hacer una tarea y dispone de un tiempo determinado para realizarla, siempre va a ocupar por completo dicho tiempo. ¿Aún no te queda claro? vemos un ejemplo:
Supongamos que un profesor encarga un trabajo de investigación a sus alumnos y les da un plazo de entrega de tres semanas. Ahora, supongamos que el tiempos es perfectamente razonable para el trabajo, pero nunca faltan los alumnos que se quejan (o sólo por llevar la contraria) y quieren más tiempo del que propone el profesor y solo unos pocos inteligentes planean sus actividades con el fin de aprovechar al máximo el tiempo dado. Pues bien, nuestro profe es mala onda y no cede. Cuando llega la fecha de entrega, la mayoría habrá logrado completar la tarea, seguramente afinando los últimos detalles el día anterior ya que expandieron la tarea ajustándola al tiempo disponible.
Esto es la Ley de Parkinson ¿Que hubiera pasado si nuestro profe fuera buena onda y les hubiera dado más tiempo? ¡El resultado hubiera sido el mismo! tendemos a querer aprovechar todo el tiempo disponible y caemos en la procrastinación. Con esto podemos concluir que podemos alcanzar un objetivo en menos tiempo del que en realidad creemos y la mejor estrategia es engañar a nuestra mente estableciendo fechas más cortas, tampoco excedas las capacidades humanas, para lograr nuestras metas.
El autor de este increíble fenómeno nos regala tres principios en la conducta que debes mejorar lo más pronto posible:
1.- El trabajo se expande hasta llenar el tiempo que tenemos a disposición
Empieza a ponerte metas más cortas, si tienes 4 semanas para hacer un trabajo, rétate a hacerlo en 3 o en 20 días.
2.- El tiempo dedicado a cualquier actividad es inversamente proporcional a su importancia.
Seguramente te han dicho algo como "Mientras más ganas, más gastas" pues déjame desmentirte, no tiene que ser así, lo mejor que puedes hacer para evitar caer en esta trampa es invertir en educación financiera, te recomiendo mucho este libro, que es una fábula muy ligera de leer y te dejará una gran enseñanza.
3 .-El tiempo dedicado a cualquier actividad es inversamente proporcional a su importancia.
Bajo este principio podemos concluir que priorizamos aquellas actividades con poco valor como los videojuegos y las redes sociales, es muy complicado darle valor a algo que realmente queremos hacer por la predisposición que tenemos a no terminarlo. Supongamos que quieres aprender un nuevo idioma y la realidad es que no le dedicas ni una hora al día, pero a redes sociales, le dedicas hasta 4, ¿qué pasaría si le restaras una a tus redes y se la dedicaras a un curso? ¡serían 365 horas al año! ahora, también puedes hacerlo aprovechando los tiempos de traslado al trabajo o a la escuela, hay audiolibros, podcast, ¿qué cambio crees que tendrías con 365 horas invertidas en una nueva habilidad?
Cuéntame, ¿eres víctima de la Ley de Parkinson?
Si quieres aprender más, te dejó este libro del creador original de este principio.
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